En lenguaje de grabado, se le llama monotipo a una impresión única, de la que no se producirá otro ejemplar igual. Esta especie de grabado es muy cotizado por los coleccionistas, pues el artista ha realizado todo un proceso técnico para lograr un solo ejemplar, cuando lo común en el grabado es producir varios ejemplares.
Se le llama monotipo al ejemplar único (tras el cual la placa se destruye) y también a aquellas impresiones que, por uso de tintas distintas u otras modificaciones, son pruebas únicas o diferenciadas respecto de la edición principal. Tambien hay monotipo cuando el artista prueba la placa con un color diferente, o usando un soporte distinto a ésta.
Es importante precisar que el monotipo se obtiene de la placa terminada, y no hay se debe confundir con las "pruebas de artista" o "pruebas de estado", que el grabador suele imprimir durante el proceso de grabado para comprobar el buen desarrollo del mismo.
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